"Después de que la ansiedad severa de mi hermana con discapacidad de desarrollo requirió de varias hospitalizaciones, yo no podía dar el cuidado que ella tanto necesitaba. Desde que ella vino a vivir a uno de los hogares comunitarios de Caridades católicas, Carol está prosperando. El personal y enfermeras están atentos a todas sus necesidades. Carol ahora tiene alegría en su vida.
Gracias a todos los que contribuyen, porque ustedes han hecho una gran diferencia en la vida de mi hermana."